(Expansión, 18-07-2024) | Laboral
El Gobierno busca implementar el derecho a la desconexión digital del trabajador durante sus vacaciones o tiempo libre, para asegurar que se respete la reducción de la jornada laboral, según anunció el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey.
La iniciativa pretende reforzar la normativa vigente, como la ley del teletrabajo, e incluir este derecho en la negociación colectiva, en el marco de la discusión sobre la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales a partir de 2025. Pérez Rey explicó que el objetivo del Ejecutivo es que "la reducción de la jornada se cumpla de manera efectiva", pese a la proliferación de dispositivos electrónicos y métodos de comunicación actuales.
Pérez Rey se reunió con la patronal y los sindicatos para continuar la negociación sobre la reducción legal de la jornada laboral, que pasaría de 40 a 37,5 horas semanales en 2025. Además, el Gobierno mostró su disposición a permitir cierta flexibilidad a las empresas en la implementación de la jornada de 37,5 horas semanales, otorgando un margen de tiempo para su aplicación gradual. Pérez Rey indicó que existe la posibilidad de que algunas empresas y sectores, como la hostelería y otros relacionados con el turismo o la agroalimentación, puedan adaptarse a lo largo de 2025 e incluso 2026.
Aunque ni el Gobierno ni los sindicatos quisieron concretar los plazos, este punto se abordará en la próxima reunión del 29 de julio. CCOO y UGT comienzan a sospechar que las patronales CEOE y Cepyme han llevado la negociación sobre la reducción de la jornada a un callejón sin salida. Por esta razón, los dirigentes de CCOO, Mari Cruz Vicente, y de UGT, Fernando Luján, advirtieron con convocar movilizaciones en septiembre si no se logra un avance significativo en la reunión del 29 de julio.
Por último, el Gobierno renovó su propuesta a CEOE y Cepyme para que las empresas puedan hacer una distribución irregular de la jornada laboral para atender picos de producción y demanda. Esto permitiría utilizar un 10% de la jornada habitual para este fin, pero con la jornada laboral actual de 40 horas semanales en lugar de las 37,5 horas semanales. Los trabajadores serían compensados en los períodos de menor actividad.