(Cinco Días, 13-05-2024) | Fiscal
La semana pasada, el Consejo de Ministros aprobó el Real Decreto 444/2024, que establece los requisitos para ser considerado usuario de especial relevancia en los servicios de intercambio de vídeos a través de plataformas, en cumplimiento del artículo 94 de la Ley General de Comunicación Audiovisual.
Dentro de este conjunto de usuarios, destaca una categoría específica conocida como "influencers", "vloggers" o "creadores de contenido", que tienen un gran impacto en el mercado audiovisual en términos de consumo e inversión publicitaria, especialmente entre el público joven.
Los usuarios de especial relevancia siempre han estado sujetos a normativas publicitarias, tanto generales como sectoriales. Sin embargo, esta nueva norma establece responsabilidades legales adicionales para ciertos usuarios que cumplan con criterios cuantitativos específicos.
En primer lugar, se considera el criterio económico, que requiere que estos usuarios hayan obtenido ingresos brutos de al menos 300.000 euros en el año natural anterior, exclusivamente de su actividad en los servicios de intercambio de vídeos a través de la plataforma que utilicen.
En segundo lugar, se evalúa el criterio de audiencia significativa, que exige que el usuario haya alcanzado, en algún momento del año natural anterior, un número mínimo de seguidores en una plataforma única (1.000.000) o en total (2.000.000), además de haber publicado al menos 24 vídeos durante el año anterior, independientemente de su duración.
Los influencers que cumplan ambos criterios deben inscribirse en el Registro Estatal de Prestadores Audiovisuales como usuarios de especial relevancia en un plazo de dos meses a partir de la entrada en vigor del Real Decreto.
Esta regulación busca brindar una mayor protección a los consumidores de estas plataformas y una mayor seguridad jurídica a los influencers, que han adquirido una importancia significativa y un volumen económico relevante en las plataformas de intercambio de vídeos.
Una vez inscritos, estos usuarios deberán cumplir con la normativa vigente en materia de protección de menores y publicidad en el ámbito audiovisual, como la identificación de espacios publicitarios y la restricción de publicidad de tabaco, medicamentos o alcohol, equiparando así sus obligaciones con las de otros profesionales audiovisuales.
Este paso hacia la equiparación entre influencers y otros prestadores de servicios de comunicación audiovisual tiene como objetivo garantizar el respeto a los principios básicos de la comunicación audiovisual y proteger al público en general, especialmente a los menores, de contenidos y comunicaciones comerciales perjudiciales.