(El Economista, 11-12-2024) | Laboral
La Seguridad Social trabaja en los ajustes normativos para el próximo año, incluyendo la planificación de su presupuesto de ingresos y gastos para 2025. Este nuevo periodo traerá consigo la actualización de las bases de cotización de los trabajadores y la implementación de nuevas cuotas introducidas en la última reforma de pensiones, destinadas a fortalecer el sistema. Según las estimaciones del Ministerio liderado por Elma Saiz, los ingresos por cotizaciones sociales en 2025 superarán los 177.300 millones de euros, lo que representa un incremento del 6,5% respecto a los 166.400 millones previstos en 2024. Esta recaudación, procedente tanto de los trabajadores como de las empresas, equivaldrá al 10,6% del PIB.
La proyección incluye factores como la evolución positiva de la economía, mejoras en el mercado laboral y el aumento de los salarios, que contribuirán a mayores ingresos temporales. Además, contempla las medidas activadas por el Gobierno para mitigar el impacto financiero del sistema a largo plazo, según detalla el informe económico asociado a la orden que regula las normas de cotización, desempleo, protección por cese de actividad, Fogasa y Formación Profesional para 2025.
El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), una sobrecotización que incrementa cada año sin traducirse en una mejora de las pensiones, es la principal fuente de ingresos adicionales. Se prevé que este mecanismo aporte 4.403 millones de euros en 2025, 690 millones más que en 2024, debido al aumento del tipo de cotización del 0,7% al 0,8%.
Otra novedad será la entrada en vigor de la cuota de solidaridad, que gravará el tramo salarial que supere la base máxima establecida. Los salarios superiores a 58.914 euros anuales contribuirán con aproximadamente 400 millones de euros adicionales. Según datos cruzados con la Agencia Tributaria, más de un millón de nóminas estarán sujetas a este nuevo aporte, que tampoco incrementará el derecho a pensión.
Asimismo, el sistema de cotización por ingresos reales para autónomos y el aumento progresivo de las bases máximas de cotización generarán casi 1.000 millones de euros adicionales, triplicando la recaudación de años anteriores. El incremento de estas bases será 1,2 puntos superior al IPC, reforzando aún más el sistema junto con las nuevas cuotas de los trabajadores por cuenta propia.
El aumento de la base mínima de cotización estará vinculado al ajuste del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Actualmente, se mantiene en 1.323 euros mensuales en 12 pagas (15.876 euros anuales), aunque podría cambiar según las decisiones del Ministerio de Trabajo. Esta base mínima también determina la cotización para mayores de 52 años que reciben el subsidio por desempleo, cuyo importe es cubierto en un 125% por el Estado.
Con el incremento del MEI, el tipo de cotización por contingencias comunes ascenderá al 28,3% del salario bruto, distribuido entre la empresa (23,6%) y el trabajador (4,7%). Este tipo general se aplicará tanto a horas ordinarias como extraordinarias, mientras que las horas extra por fuerza mayor seguirán cotizando al 14% (12% a cargo de la empresa y 2% del empleado).
El gasto en pensiones continúa aumentando de manera sostenida. Por efecto demográfico y el reemplazo de pensiones más bajas por otras más altas, el desembolso anual de la Seguridad Social en 2025 alcanzará los 217.000 millones de euros, equivalentes al 13% del PIB. Según el experto de Fedea, Miguel Ángel García Díaz, este incremento supone unos 11.000 millones de euros más que en 2024, lo que representa un 0,7% adicional del PIB debido a la revalorización de prestaciones y la incorporación de nuevos pensionistas.