(La Vanguardia, 18-09-2025) | Mercantil, civil y administrativo
Las compañías catalanas lograron salir de la pandemia con notables incrementos tanto en ventas como en rentabilidad. No obstante, el panorama no está libre de desafíos. El nuevo Anuario de la Pyme catalana, elaborado por Pimec, revela que la productividad por trabajador descendió un 2,2%, situándose en 77.407 euros anuales. El retroceso se atribuye, en gran medida, al mayor peso que ha adquirido el sector servicios frente a la ligera contracción de la industria.
Durante la presentación del informe, el presidente del Observatori de la Pime de Catalunya, Oriol Amat, señaló que la caída de la productividad se debe a un crecimiento del empleo más acelerado que el del valor añadido bruto (VAB). En concreto, la ocupación aumentó un 5,2%, mientras que el VAB lo hizo solo un 2,9%. "Estamos creciendo a base de esfuerzo humano, incorporando más personas al mercado laboral", ilustró por su parte el presidente de Pimec, Antoni Cañete.
La pérdida de productividad se concentra en los servicios: el VAB industrial avanzó un 7,1%, frente a un retroceso del 0,3% en los servicios. En cuanto al empleo, la industria apenas subió un 0,8%, mientras que los servicios lo hicieron en un 2,6%. "La industria aporta más valor añadido, mientras que los servicios tienden a reducirlo", apuntó Amat.
El documento también destaca que las pymes soportaron mejor la caída de la productividad que las grandes compañías, pese a que su incremento del VAB fue más modesto (2,2% frente al 5,2% de las mayores). La diferencia radica en el fuerte aumento de la contratación en las empresas con más de 250 empleados, que elevaron sus plantillas un 11,7%.
El Anuario de la Pyme, basado en datos del registro mercantil de 2023, refleja ya un ejercicio normalizado tras el impacto del Covid. Según Cañete, estas cifras permiten proyectar con mayor fiabilidad lo ocurrido en 2024 y lo que se prevé para 2025. "Confirman que la pyme sigue siendo un pilar fundamental en la estructura productiva del país", subrayó el presidente de la patronal.
Actualmente, las pymes representan el 98,9% del tejido empresarial, el 64% del VAB y el 60% del empleo en Cataluña. Sin embargo, en los últimos cinco años han ido perdiendo peso tanto en valor añadido como en ocupación. "Somos un país de pymes, pero las grandes empresas están ganando protagonismo", señaló Amat. Ante esta tendencia, Cañete defendió la necesidad de que las pequeñas y medianas compañías crezcan en tamaño para ganar solidez y capacidad de expansión.