(Expansión, 17-09-2024) | Fiscal
Sumar ha presentado sus propuestas para los Presupuestos del próximo año, destacando entre sus principales demandas un aumento de la carga fiscal sobre las grandes fortunas y rentas más altas, así como la prohibición de la compra de viviendas con fines especulativos.
Yolanda Díaz, en un acto celebrado este lunes, expuso las contribuciones, reivindicaciones y exigencias de su plataforma de cara a la negociación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2025 con el PSOE de Pedro Sánchez. Díaz hizo presión en dos frentes: por un lado, instando a Sánchez a luchar por la aprobación de los presupuestos, argumentando que "España no puede estar a la defensiva; la ciudadanía de la coalición quiere transformación". Por otro lado, presentó un conjunto de medidas fiscales e iniciativas intervencionistas para respaldar el Presupuesto.
Acompañada por los cuatro ministros de Sumar en el Gobierno de coalición (Ernest Urtasun, Pablo Bustinduy, Mónica García y Sira Rego), Díaz advirtió a Sánchez que "un gobierno progresista que no legisla avances sociales significativos para las clases trabajadoras desilusiona y desmoviliza a su electorado, allanando el camino a futuros gobiernos de derecha". El plan de Sumar incluye una reforma fiscal profunda, centrada principalmente en un incremento de impuestos y una mayor intervención en el mercado de la vivienda, que consideran "el principal problema de la ciudadanía".
En lo fiscal, Sumar propone un aumento de la presión tributaria sobre "quienes más tienen". Entre sus demandas está la creación de un tramo adicional en el IRPF para las rentas superiores a 150.000 euros, así como equiparar progresivamente los impuestos sobre las rentas del capital con los de las rentas del trabajo. También plantean un impuesto de "solidaridad" para herencias que superen el millón de euros, excluyendo la vivienda habitual, y ampliar el impuesto a grandes fortunas a patrimonios a partir de un millón de euros, en lugar de los tres millones actuales.
Entre las medidas adicionales, Sumar exige mantener los impuestos a la banca y energéticas sin reducciones por inversiones sostenibles, establecer un límite a la concentración de capital en las sicav, reducir las bonificaciones fiscales de las socimis, y reformar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para hacerlo progresivo según la riqueza, con el objetivo de aumentar los ingresos en 2.000 millones de euros. También proponen gravar a las grandes cadenas de distribución por prácticas abusivas, aplicar IVA a la educación y los seguros privados de salud, y establecer impuestos sobre aviones privados, yates y coches de lujo.
Para mitigar estas subidas, Sumar propone reducir impuestos "injustos", como el IVA de peluquerías, electricidad, pañales, productos sin gluten y servicios veterinarios. Además, sugieren una prestación universal de 200 euros mensuales por hijo hasta los 18 años, ampliar el permiso por nacimiento de 16 a 20 semanas, y garantizar que al menos cuatro de las ocho semanas de permiso para el cuidado de hijos sean retribuidas.
En cuanto a vivienda, Sumar plantea medidas como prohibir temporalmente la compra de inmuebles en zonas tensionadas si no es para uso habitual o alquiler asequible, y que los contratos de alquiler sean indefinidos por defecto, similares a los contratos laborales. También proponen limitar el precio de los alquileres en zonas tensionadas al 30% de la renta de los hogares y sancionar a las comunidades autónomas que no apliquen la Ley en estas áreas, especialmente las gobernadas por el PP. A esto se suma el aumento del IVA al 21% en pisos turísticos y eliminar la deducibilidad de gastos financieros en el cálculo del IRPF y Sociedades.