(El País, 23-10-2025) | Laboral
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha anunciado que la patronal abandona la mesa de negociación abierta el pasado lunes para reformar la indemnización por despido improcedente. Según explicó, la decisión fue adoptada este miércoles durante la reunión del Comité Ejecutivo, al considerar que la negociación parte de una premisa errónea: que la normativa española no cumple con la Carta Social Europea.
"No vamos a participar en una mesa cuya premisa principal no es cierta",
sentenció Garamendi, recordando que el Tribunal Supremo ya estableció este verano que no procede aplicar indemnizaciones adicionales a los 33 días por año trabajado (con un máximo de 24 mensualidades), rechazando así el criterio del Comité Europeo de Derechos Sociales, que había respaldado una denuncia sindical contra España por esta cuestión.
El líder de la patronal comparó esta situación con la negociación que llevó a la creación de la 'ley rider', derivada de la sentencia sobre los falsos autónomos. En aquel caso -explicó- la CEOE aceptó pactar una reforma que seguía las directrices marcadas por los tribunales, pero en esta ocasión no están dispuestos a contradecir el fallo del Supremo ni a debatir una propuesta que, según sospechan, partirá de las reivindicaciones de CCOO y UGT, que se harán públicas en las próximas semanas.
Este movimiento supone una ruptura poco habitual dentro del diálogo social: la CEOE no había abandonado ninguna de las mesas de negociación recientes, pese a sus desacuerdos con el aumento del salario mínimo interprofesional (SMI), la reforma del subsidio por desempleo o la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas. En esta última, los sindicatos acusaron a la patronal de acudir "solo para calentar la silla", sin presentar propuestas.
Fuentes de la organización empresarial aclaran, no obstante, que esta decisión no implica una ruptura total del diálogo social. La CEOE seguirá participando en las otras mesas abiertas, como las relativas al SMI o a la prevención de riesgos laborales. Sin embargo, tanto Garamendi como la presidenta de Cepyme han criticado la "presión constante" que -afirman- ejerce el Ministerio de Trabajo sobre las empresas, especialmente las pequeñas y medianas, y que ha impedido alcanzar acuerdos en más de un año.
Durante la primera Asamblea General de Cepyme, su presidenta, Gerardo de Miguel, destacó el aumento continuado de los costes laborales que afrontan las pymes, a lo que se suma la previsible nueva subida del SMI, que podría hacer que algunos trabajadores comiencen a pagar IRPF por primera vez. En ese contexto, Garamendi añadió:
"Vosotros sabéis lo que es pagar una nómina, y lo haremos con impuestos o sin impuestos", en alusión al encargo hecho a la comisión de expertos para emitir dos propuestas alternativas sobre el SMI, dependiendo de la decisión final que adopte el Ministerio de Hacienda.