(Expansión, 02-10-2025) | Fiscal
La renta media declarada por los contribuyentes españoles en el IRPF continúa en ascenso, según refleja el último mapa fiscal elaborado por la Agencia Tributaria a partir de los datos de la estadística de declarantes del Impuesto sobre la Renta. En concreto, las cifras oficiales muestran que en 2023 la renta media bruta alcanzó los 31.333 euros, un 3,1% más que en 2022, cuando se situaba en 30.400 euros. Sin embargo, el informe también confirma que la brecha económica se amplió, llegando a marcar diferencias de hasta 74.000 euros entre municipios.
Los datos, publicados ayer, recogen un total de 23,98 millones de declaraciones correspondientes a 7.609 localidades de régimen común (excluyendo a País Vasco y Navarra por su sistema foral), lo que permite establecer comparaciones entre municipios con más de mil habitantes.
De nuevo, Pozuelo de Alarcón (Madrid) lidera la clasificación como el municipio con mayor renta media bruta por habitante, alcanzando los 88.011 euros y repitiendo por quinto año consecutivo en primera posición. Le sigue Boadilla del Monte, también en Madrid, que asciende un puesto con 70.869 euros de media. En tercer lugar aparece Sant Just Desvern (Barcelona), que entra en el podio con 67.265 euros, seguido de Sant Cugat del Vallès (66.073 euros) y Matadepera (65.536 euros). Completan el listado de las diez localidades más acomodadas Alella (62.304), Torrelodones (61.359), Aigües (60.883), Alcobendas (60.576) y Majadahonda (60.171). A partir de ese nivel, las rentas medias municipales ya descienden por debajo de los 60.000 euros.
En el extremo contrario, los municipios con menor renta media declarada son Benamargosa (Málaga), con 13.831 euros; Guadahortuna (Granada), con 14.339; y Colomera (Almería), con 14.507 euros. Con ello, la distancia entre el municipio más rico y el más pobre se incrementó un 3,5% en el último año, pasando de 71.665 a 75.180 euros (diferencia entre los 88.323 de Pozuelo y los 13.658 de Huesa, en Jaén).
El informe señala que los principales componentes de la renta sujeta al impuesto son los ingresos laborales y de actividades económicas. En las grandes poblaciones predominan los salarios, mientras que en los municipios más pequeños tienen mayor peso los rendimientos de actividades económicas. Hacienda subraya que, en general, la estructura de ingresos es parecida entre localidades, aunque en las de menos de mil habitantes las rentas del trabajo ceden protagonismo a las procedentes de actividades profesionales o empresariales.
En cuanto a magnitudes, mientras la renta media bruta se sitúa en 31.333 euros, la mediana representa un 75,8% de esa cifra (23.757 euros). Por su parte, la renta media disponible asciende a 25.235 euros, un 2,8% más que en 2022. El análisis también constata una relación directa entre el tamaño poblacional y la renta media: cuanto mayor es la localidad, mayor tiende a ser el nivel de ingresos, salvo en los municipios de entre 100.001 y 500.000 habitantes, que rompen esta tendencia y muestran cifras similares a la media nacional.
Por último, la estadística desglosa la evolución de cada componente de la renta. Todos registran incrementos, excepto las ganancias patrimoniales netas, que caen un 10,2%. Destacan al alza las rentas de capital mobiliario (+15,3%), seguidas de los ingresos por actividades económicas (+5,1%) y, sobre todo, de las rentas del trabajo, que crecen un 8,6% y siguen siendo el pilar principal de la renta declarada.