(La Vanguardia, 26-09-2024) | Mercantil, civil y administrativo
Según un estudio divulgado por CC.OO., entre 2019 y 2023 Madrid dominó el panorama de inversión extranjera en España con un 64,8%, superando ampliamente a Cataluña que logró un 11,8% durante ese quinquenio. El País Vasco y la Comunitat Valenciana se posicionaron en tercer y cuarto lugar, con un 6,3% y 4,3% respectivamente.
Madrid lidera el ranking de inversión extranjera entre las comunidades autónomas, con cifras que parecen mostrar una competencia sin rival (60% del total, 75%, 83%, etc.). Este liderazgo es innegable y frecuentemente se destaca en los informes trimestrales del Ministerio de Industria, donde la Comunidad de Madrid publica comunicados celebrando su éxito. Sin embargo, un reciente informe del sindicato Comisiones Obreras de Madrid, presentado este miércoles, cuestiona el optimismo de la presidenta Isabel Díaz Ayuso al referirse a este tema, el cual suele presentar como un ejemplo del éxito de su modelo económico. El informe sugiere adoptar un enfoque escéptico hacia las grandes cifras y realizar un análisis más detallado del flujo de inversión, que entre 2019 y 2023 alcanzó los 105.300 millones de euros, equivalentes al 8,6% del PIB regional.
Al analizar más a fondo los datos, emergen operaciones que buscan aprovechar ventajas fiscales, así como compraventas de grandes empresas del IBEX, además de inversiones en firmas que realmente operan en otras regiones, pero que se contabilizan como si estuvieran en Madrid, generando una percepción errónea de que esos fondos han llegado a la capital (conocido como efecto sede).
CC.OO. presenta varios ejemplos que ilustran el tipo de operaciones que sustentan las cifras de inversión extranjera directa (IED). Algunas de estas son bien conocidas. Por ejemplo, en 2022, se registró una inversión de más de 2.000 millones de euros en LaLiga, ubicada en la zona empresarial de la avenida de América en Madrid, proveniente del fondo británico CVC Capital Partners. Este dinero fue destinado a préstamos a 42 clubes en toda España. El año pasado, el fondo estadounidense EIG también realizó una inversión de 3.400 millones de euros en la filial de exploración y producción de la petrolera española Repsol, ubicada en la calle Méndez Álvaro de Madrid. En ambos casos, se trata de transacciones de acciones de grandes empresas, donde el cambio de propiedad no necesariamente implica alteraciones en la producción.
El informe menciona las distorsiones que surgen del efecto capitalidad (cuando grandes empresas extranjeras eligen Madrid como sede para beneficiarse de su proximidad a los centros de decisiones económicas y políticas) y del efecto sede (donde se registra en Madrid una actividad que realmente ocurre en otra región). Esto ayuda a explicar datos sorprendentes sobre la IED. Por ejemplo, entre 2019 y 2023, Madrid captó el 100% de la inversión extranjera en la extracción de petróleo y gas natural, así como en la industria del tabaco; el 99,7% en el sector de radio y televisión; el 99,1% en transporte aéreo y en coquerías y refinación de petróleo; el 94,1% en actividades de construcción especializada y el 93,7% en telecomunicaciones.
Además, otro tipo de IED que no es productiva también contribuye al liderazgo de Madrid, como las operaciones entre empresas de una misma multinacional. Estos flujos provienen de las Empresas de Tenencia de Valores Extranjeros (ETVE), que son compañías establecidas en España para poseer participaciones en empresas extranjeras. Estas ETVE funcionan como herramientas para optimizar fiscalmente las operaciones dentro de un mismo grupo empresarial, a menudo implicando estrategias de elusión fiscal. El informe señala que, a pesar de su elevado valor nominal, su contribución real al desarrollo económico es inexistente.
Tras detallar la IED en Madrid, el sindicato analiza otros indicadores que podrían ofrecer una evaluación más precisa del impacto real de este flujo. Uno de estos indicadores es la ubicación real del inmovilizado material de las empresas extranjeras, que incluye terrenos, edificios, cadenas de montaje, maquinaria, equipos de transporte y mobiliario utilizados por una empresa.
En este sentido, Cataluña ha sido la región con mayor concentración de inmovilizado material en los últimos cinco años para los que hay datos disponibles (2017-2021), representando un 21,0% del total, a pesar de haber recibido solo el 9,3% de los flujos de IED en ese mismo periodo. Por otro lado, el inmovilizado material en la Comunidad de Madrid representa el 19,9%.