(Expansión, 20-06-2025) | Fiscal
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha solicitado este jueves a los países de la eurozona con una elevada deuda pública y un margen fiscal reducido -como es el caso de España- que lleven a cabo importantes ajustes en sus cuentas públicas. Esta petición llega en un contexto en el que estos países deben afrontar un aumento del gasto derivado de los compromisos en materia de seguridad, defensa y del envejecimiento demográfico.
En su informe sobre la economía de la eurozona, presentado ante los ministros de Finanzas del bloque monetario reunidos en Luxemburgo, el FMI indica que "en aquellos países con niveles altos de deuda y poco margen fiscal, es imprescindible aplicar medidas de consolidación presupuestaria significativas para reducir los riesgos". En cambio, los países con mayor capacidad fiscal pueden permitirse retrasar estos ajustes.
El documento insiste en que es clave llevar a cabo una consolidación fiscal ordenada y que fomente el crecimiento económico, con el objetivo de asegurar la sostenibilidad de las cuentas públicas y hacer frente a las crecientes presiones de gasto, especialmente por el envejecimiento de la población y el incremento de los costes en seguridad.
En cuanto a los objetivos concretos, el FMI recomienda que, salvo Alemania, todos los países del euro logren un superávit estructural primario equivalente al 1,4% del PIB para el año 2030. Para alcanzar esta meta, será necesario reducir el déficit fiscal en unos dos puntos porcentuales de aquí a 2030 en comparación con las proyecciones actuales.
El organismo reconoce, sin embargo, que esta consolidación fiscal plantea decisiones difíciles, ya que Europa está viendo cómo se intensifican más rápido de lo esperado diversas presiones de gasto. Según las estimaciones del FMI, estos factores -entre ellos el envejecimiento poblacional, el aumento de los intereses de la deuda, la transición energética y los gastos en defensa- podrían suponer un coste anual adicional del 4,4% del PIB de la eurozona para 2050.
En relación con los planes de varios gobiernos europeos de incrementar el presupuesto destinado a defensa, el FMI insta tanto a la Comisión Europea como a los Estados miembros a evaluar el impacto que esto tendrá en la sostenibilidad de la deuda, y a diseñar estrategias que permitan estabilizarla o reducirla en el medio plazo.
No obstante, el organismo advierte que aquellos países que presentan bajos niveles de riesgo fiscal y que deseen elevar su gasto para estimular el crecimiento económico y reforzar su resiliencia, deberían tener margen para hacerlo sin quedar restringidos por las nuevas normas fiscales de la Unión Europea.