(El País, 05-09-2025) | Laboral
Uno de esos aspectos en los que insiste Pimec, y coincide el resto del ecosistema empresarial, es la importancia de combatir el absentismo, dado el récord de bajas por incapacidad temporal que registra España. Por ello viene reclamando integrar el asunto en la conversación sobre la reducción de jornada. Es algo a lo que ha accedido el Ministerio de Trabajo. Lo dejó claro Yolanda Díaz en mayo, en el Foro CREO organizado por Cinco Días y Prisa Media: "Hay margen para actuar en nuestro país. Lo he aprendido de las empresas españolas".
Díaz ni precisó entonces cuáles deberían ser esas medidas ni lo ha hecho después, pero lo que dejan claro fuentes conocedoras de la negociación es que este es uno de los aspectos sobre los que más han discutido Trabajo y Junts. Para el ministerio de Díaz es un asunto delicado, dado lo enconado del debate: el incremento de las bajas ha agitado un discurso muy crítico de algunas voces de la derecha económica, que apuntan a que buena parte de esas ausencias son fraudulentas. Esto genera un enfado en los sindicatos que se concretó en una campaña reciente de CC OO, con el lema Ejercer derechos no es absentismo. Desde su punto de vista, el aumento del absentismo se relaciona con el envejecimiento de la población y con el tiempo de espera de la sanidad pública, lo que prolonga las ausencias.
Para corregir ese último problema, CEOE, Cepyme, UGT, CC OO y el Ministerio de Seguridad Social acordaron el año pasado dar un mayor protagonismo a las mutuas en la recuperación de las dolencias musculoesqueléticas. Ese acuerdo (que se concreta mediante convenios con los servicios de salud de las comunidades autónomas) ya generó críticas a los dos sindicatos más representativos desde otras centrales de menor tamaño y también desde los grupos parlamentarios de izquierdas que apoyaron la investidura de Pedro Sánchez. Es más, el Gobierno sacó adelante la reforma que incluía esa medida (aunque justo ese punto no necesitaba respaldo parlamentario) con el apoyo del PP y con el voto en contra de varios socios progresistas.
Con ese balance político del paso que dio la Seguridad Social para reducir el absentismo, y con la tormenta que despertó la idea de las bajas flexibles (rápidamente renombradas como altas progresivas), cabe anticipar que cualquier movimiento de Trabajo en este terreno puede ser material inflamable en su costado izquierdo. Este periódico ha insistido al ministerio para que concrete en qué consiste ese plan, pero ha rechazado especificarlo.