(Cinco Días, 23-09-2024) | Mercantil, civil y administrativo
Todo está listo para que el Consejo de Ministros, posiblemente mañana mismo, apruebe el envío a las Cortes del proyecto de Ley de Restablecimiento de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), el cual se tramitará por la vía de urgencia. El Gobierno puede dar este paso ahora que el Consejo de Estado ha emitido su informe sobre la futura norma, en el que no se presentan objeciones importantes, lo que permitirá al Ejecutivo mencionar en el preámbulo de la ley que cuenta con el respaldo de este organismo consultivo. Sin embargo, el Consejo de Estado ha señalado que sería necesaria una justificación más sólida para la recuperación de la CNE, según fuentes familiarizadas con el informe.
Un aspecto que ha causado sorpresa es que el Consejo de Estado, cuyo papel es verificar que los textos cumplan con la legalidad, ha incluido una recomendación para que las personas que hayan sido consejeros de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) no puedan ser designadas para la nueva CNE, la cual se espera que entre en funcionamiento a principios del próximo año.
Varias fuentes con acceso al informe consideran llamativa esta "intervención política" del Consejo de Estado, que, en contraste, emitió en 2013 un informe "permisivo" sobre la creación de la CNMC, cuando se integraron varios organismos reguladores sectoriales, como la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) y la Comisión Nacional de la Competencia (CNC). En ese momento, el Tribunal Supremo, en una sentencia de 2018, declaró ilegales los ceses de dos consejeros de la CMT, Xabier Ormaetxea y Bernardo Lorenzo, y ordenó su reincorporación al nuevo regulador. Solo tres países de la Unión Europea (España, Países Bajos y Estonia) adoptaron este modelo de integración de reguladores.
El anteproyecto de ley actual establece que los miembros del consejo de la CNE, incluyendo su presidente, serán nombrados por real decreto del Gobierno, a propuesta del Ministerio de Transición Ecológica, y deberán ser personas con prestigio y competencia profesional en el sector, con al menos cinco años de experiencia en áreas supervisadas por la Comisión. Además, la persona propuesta deberá comparecer ante una comisión del Congreso. El mandato de los consejeros será de seis años, sin posibilidad de reelección inmediata, aunque el anteproyecto no menciona futuras designaciones.
Aunque la normativa europea sobre el mercado interior de la energía permite mandatos de cinco a siete años con opción a reelección, España optó por un mandato único de seis años para la CNMC, un esquema similar al que se propone para la CNE.
El anteproyecto no cierra la puerta a que antiguos o actuales consejeros de la CNMC puedan pasar a la CNE, lo que el Consejo de Estado cuestiona mencionando la reelección tras el fin de mandato, aunque no se refiere a la posibilidad de reelección en el futuro. El dictamen reconoce que la normativa europea no prohíbe la reelección y no plantea modificar la ley para incluir una prohibición a los consejeros de la CNMC.
Existen precedentes que contradicen la recomendación del Consejo de Estado, como el caso de Pilar Sánchez Núñez, quien fue consejera de la antigua CNC entre 2007 y 2013 y se incorporó en 2020 a la CNMC, donde actualmente es vocal. También están los casos de Josep María Guinart e Idoia Zenarruzabeitia, antiguos consejeros de la CNE, que se integraron en la CNMC en 2013 con mandatos completos de seis años. Asimismo, Xabier Ormaetxea y Bernardo Lorenzo, quienes fueron cesados ilegalmente de la CMT, fueron reincorporados a la CNMC tras la sentencia del Supremo en 2017, donde actualmente continúan en funciones, mientras la CNMC acumula cinco vacantes desde hace un año.