(El Periódico, 14-07-2025) | Laboral
Entre enero y mayo de este año, se registraron 297 fallecimientos por accidentes laborales, lo que representa una disminución de siete muertes respecto al mismo periodo de 2024, es decir, una bajada del 2,3% en la siniestralidad laboral. Sin embargo, la mesa de diálogo social para reformar la Ley de Prevención de Riesgos Laborales aún no ha concluido su labor, a pesar de llevar más de un año de negociaciones.
De acuerdo con los datos provisionales del Ministerio de Trabajo y Economía Social, las principales causas de muerte en el ámbito laboral durante los primeros cinco meses de 2025 fueron infartos y derrames cerebrales (107 casos), caídas desde altura (41), accidentes de tráfico (33) y atrapamientos, aplastamientos o amputaciones (28).
Desde UGT han denunciado que estas cifras ponen de manifiesto que la salud y seguridad laboral sigue sin abordarse de manera efectiva en muchas empresas. Según el sindicato, las medidas de prevención se aplican de forma meramente formal y no real, lo que deja al descubierto una falta de compromiso con la seguridad de los trabajadores.
Del total de fallecimientos, 245 ocurrieron en el propio centro de trabajo, lo que supone doce menos que en el mismo periodo del año anterior. Las 52 muertes restantes se produjeron durante los trayectos de ida o vuelta al lugar de trabajo, conocidas como "in itinere", cinco más que en 2024. Por tipo de empleo, 278 de los fallecidos eran trabajadores por cuenta ajena y 19 autónomos. Por sectores, el de servicios encabeza la lista con 112 muertes, seguido de la construcción (70), la industria (44) y el sector agrario (19). En cuanto al género, 231 de los fallecidos eran hombres y 14 mujeres.
En relación con los accidentes laborales con baja, durante el primer trimestre del año se notificaron 243.664 casos, 10.871 menos que en el mismo periodo del año anterior. La industria manufacturera fue el sector con más siniestros (38.400). Además, se registraron 214.921 accidentes sin baja, lo que supone una reducción de 11.751 casos respecto a 2024. A pesar de esta realidad, la actualización de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales de 1995 continúa sin avances concretos. Tras año y medio de negociaciones entre el Ministerio de Trabajo, sindicatos y organizaciones empresariales, aún no se ha alcanzado un acuerdo.
El borrador que manejan las partes contempla incluir nuevos elementos como la adaptación ante fenómenos climáticos extremos o los desafíos de la digitalización. También se pretende reforzar la protección frente a la violencia y el acoso laboral, así como atender los riesgos psicosociales y aplicar una perspectiva de género. Además, se prevé una revisión del listado de enfermedades profesionales. Los sindicatos, por su parte, exigen al Gobierno una mayor implicación. En particular, piden fortalecer la figura del delegado de prevención, especialmente en las pequeñas y medianas empresas, donde muchas veces no se llevan a cabo evaluaciones de riesgos ni se informa sobre las medidas de protección necesarias.
Asimismo, reclaman al Ministerio de Trabajo una mayor exigencia hacia los servicios de prevención externos, para garantizar que lleguen a todas las empresas y realicen las evaluaciones necesarias. Según datos de 2024, un tercio de los accidentes laborales se produjo en lugares donde no se había cumplido con la evaluación de riesgos exigida por ley.